"NO LOS VOY A DEFRAUDAR..."

Columna de opinión

“NO LOS VOY A DEFRAUDAR…”

Por Rodolfo José Bernat

                                   Sucedió el 31 de julio último,  en la transmisión por la cadena Nacional de radio y televisión. El escenario; la Casa Rosada, el auditórium compuesto por el Vice-presidente Amado Boudou, gobernadores provinciales, ministros, empresarios y jóvenes, mayoritariamente de “La Campora”. La disertante, como no podía ser de otra manera, la presidente Cristina Fernández Vda. de Kirchner, como única oradora.

Luego de recordar declaraciones de su extinto esposo, Néstor Kirchner y mostrar una serie de gráficos, donde se nos reveló una Argentina para la mayor parte pueblo argentino y solamente reservado al núcleo que detenta el poder y sus resortes.

Cuando Cristina habla solo se permiten dos cosas: aplaudir y vivar a la presidente. En un momento de su disertación Cristina, no se si consiente o en forma inconsciente, pronuncio la frase que “inmortalizara” al ex presidente Carlos Saúl Menem: “NO LOS VOY A DEFRAUDAR” y para un importante sector del público televidente esa expresión, debe haber sido “la gota de agua que rebalso el vaso”. Nadie ignora lo que sucedió en la Argentina después de esa promesa. Aquella frase fue el elemento vital para etiquetar a todo el gobierno menemista. ¿En boca de la presidente Cristina Fernández, para que servirá?  Eso sí, en su extensa y bien documentada alocución, la presidente anunció el segundo aumento para los jubilados en este año y que será del 17,21 por ciento, con lo cual, la jubilación mínima que es la que perciben la mayoría de los jubilados del país, pasará de $ 2757,00 a $ 3231,63 a partir del 1° de septiembre de 2014. Después de explicar como se emplea el resto del dinero de los jubilados nucleados en el ANSES, la presidente empleo una frase que no termine de entender y que considero, gran parte de la platea televisiva tampoco entendió: “LA PLATA NO SALE DEBAJO DE LAS BALDOSAS”, se me ocurre que la frase es un galimatías empleado por la señora Presidente, para explicar, lo que no tiene explicación, y que es, pensar que con esa limosna un ciudadano después de trabajar 30 años,  y aportar al ANSES durante todo ese tiempo, pueda vivir con dignidad con esa suma de dinero, que para muchos funcionarios del estado nacional y provincial, deben ser más o menos el gasto diario de bolsillo.

Esa misma mañana el Jefe del Gabinete de Ministros, Jorge Capitanich, se reunía con empresarios y banqueros para pedirle “que no despidan personal”. Tal vez como una medida “de necesidad y urgencia” ante la inminente entrada en “default”, con sus consiguientes consecuencias: “aumento del gasto público, mas emisión y mayor inflación”. En cambio Cristina y su ministro de Economía Axel Kicillof niegan el “default”, que ya es  “vox populi” en varios países del orbe.

“Estamos en 31 de julio y la vida sigue”, manifestó la presidente por la cadena nacional, mientras el joven Axel sonreía satisfecho ante la cobertura de su jefa. Pocas horas antes en Nueva York y luego de abortar el “Salvataje” propuesto por bancos nacionales de nuestro país, el ministro durante una conferencia de prensa, a la que se debe calificar como mínimo, de triste y que sin embargo fuera convalidada por la presidente Cristina Fernández, Kicillof manifestaba: “Ofrecimos a los “holdouts” que entren al canje de 2005 y 2010; con lo que, en las condiciones de hoy  obtendrían una ganancia del 300 por ciento, pero ellos quieren la sentencia casi usuraria que le da más del 1600 por ciento de las ganancias”. Mientras Cristina en su monólogo televisivo expresaba: “VOLVER A ENDEUDAR A LA ARGENTINA CONVERTIRÍA AL PAÍS EN INVIABLE… YA VIMOS ESA HISTORIA Y NO LA PIENSO REPETIR…”  prosiguió pidiendo que haya “UNA UNIDAD MONOLITICA CON TODOS LOS ARGENTINOS, PORQUE ES LA SALIDA PARA EL FUTURO”…porque es “LA SALIDA PARA EL FUTURO”, porque “VOLVEREMOS A SER UN PAÍS VIABLE…” “YO SOY EL PRESENTE Y UN CACHITO DEL FUTURO, USTEDES SON EL FUTURO Y TIENEN QUE DEFENDER LO QUE HEMOS LOGRADO”.

Señora Presidente, le pido con todo respeto, que de una vez por todas se informe al Pueblo sobre los motivos centrales , de este conflicto que arranca hace 8 años atrás, en 2006 en Nueva York, en el juzgado de primera instancia del juez Thomas Griesa, quién luego de la presentación de las partes, aporte de pruebas y alegatos, se llegó al momento de dictar sentencia, la que fue desfavorable para la Argentina. Los representantes legales del gobierno argentino, por mandato de la titular del Poder Ejecutivo, presento la apelación de la sentencia ante la Cámara, la cual el 26 de octubre de 2012, volvió a revisar la causa y la sentencia, fallando una vez más a favor de los “holdouts”, y ordenando al juez Thomas Griesa, “que defina el modo y tiempo de pago”.

Los  abogados que representan a la Argentina, cumpliendo expresas directivas del Gobierno argentino, siguieron “chicaneando” las resoluciones judiciales de los EE UU. En junio de 2014 la Corte Suprema de los EE. UU., se negó a considerar y revisar la apelación de un Tribunal de Apelaciones de aquel país y ordeno a la Argentina, pagar a los tenedores de bonos que se habían negado a aceptar la restructuración de la deuda argentina después del “default” de 2001. Con esto, el Supremo Tribunal de los EE. UU., deja en firme la sentencia del juez Thomas Griesa. Hay tres cláusulas que “maniatan” a la Argentina en su pelea con los “buitres”: 1ra)Pari passu (la cláusula de los “buitres”), 2da.) CAC, la cláusula de los tribunales) y 3ra.) RUFO, la cláusula argentina). El texto de estas tres cláusulas, dejan en claro porqué no se pueden desconocer obligaciones que, por propia voluntad, la Argentina acepto y hoy no puede desconocer.

No es exacerbando el espíritu patriótico del Pueblo argentino que solucionaremos nuestros problemas, Galtieri lo intento en Abril de 1982 y aún resuena en nuestros oídos, la frase que desató una de las etapas más trágicas de nuestra historia. Ante una Plaza de Mayo desbordante, sentenció: “SI QUIEREN VENIR QUE VENGAN, LES PRESENTAREMOS BATALLA”. Nadie ignora lo que sucedió después y hasta hoy, el pueblo sigue pagando las consecuencias.

No repitamos errores. Demostremos al mundo que somos una República, con democracia, en la que se puede y se debe confiar.

Fcio. Varela, 2 de agosto de 2014.-